Después de unas semanas aprendiendo con Bitpania, me animé a dar el paso: abrir mi primera operación.
No voy a mentir. Tenía miedo. Sentía que me faltaba experiencia, que no era el momento. Pero también sabía que no hay mejor maestro que la práctica. Así que decidí entrar con poco capital, aplicando los conceptos que había aprendido en los módulos de iniciación.
Analicé el gráfico del par EUR/USD, apliqué los indicadores recomendados, marqué mi stop loss y mi take profit. Respiré hondo y… ejecuté.
¿El resultado? Perdí.
Sí, mi primer trade fue una pérdida. Pero, curiosamente, no me sentí derrotado. Gracias a Bitpania, sabía que el trading no es un camino recto al éxito, sino un proceso de mejora constante. Revisé mi operación, analicé qué hice mal y compartí mis dudas en la comunidad.
La respuesta fue inmediata. Otros traders compartieron consejos, Bitpania publicó un artículo relacionado y sentí, por primera vez, que no estaba solo.
Perder me enseñó más que cualquier video. Aprendí a controlar emociones, a seguir mi plan, a no operar por impulso.
Hoy veo esa primera operación como un paso necesario. Y agradezco que lo haya dado con el respaldo de una plataforma que no solo te educa, sino que te acompaña.